Centro de Talasoterapia en Gijón

La parcela orientada perpendicularmente al mar y con una zona edificada que se interpone entre éste y aquella, tiene así mismo una fachada que mira claramente hacia la bahía de Gijón. El edificio se inserta buscando el mar, las vistas.

El usuario llega a un espacio continuo pautado por los patios donde se encuentran las zonas de agua: la gran piscina interior, las piscinas exteriores y los jacuzzis, salpicado por las distintas cabinas del circuito termal. Desde aquí se puede acceder a la planta inferior donde se encuentran los espacios más íntimos vinculados a los patios o a la planta superior donde se desarrollan los centros de uso independiente: deportivo, rehabilitación…

El hotel se plantea como remate de la avenida y del edificio, conectado visualmente con el centro de talasoterapia, pero con un funcionamiento independiente con la posibilidad de acceso directo para disfrutar de las instalaciones.

Se ha pretendido realizar una arquitectura hecha de asimetrías y contrapuntos, generando en la planta baja visiones distintas a través de la rasgadura que recorre todo el edificio y en la planta primera múltiples puntos de vista, extrovertidos unos hacia la bahía y el horizonte marino, ensimismados otros en los espacios interiores creados por el proceso de rotura dejando entrar el parque que rodea el edificio.

Año
2003
Promotor
Ayuntamiento de Gijón
Localización
Ería de Piles, Gijón. Asturias
Arquitecto
Carla Sentieri
Fotografías
Sentieri Arquitectos